26 noviembre 2007

Palabras

"Las palabras antiguas son las mejores,
y las breves las mejores de todas"

Winston Churchill


Carpe Diem en la entrada anterior me preguntaba el significado de una de las palabras que utilicé.
Su pregunta me hizo recordar cuando abandoné mi ciudad natal para ir a la Universidad. Entonces descubrí que expresiones y palabras que había estado usando a diario resultaban extrañas a oídos de mis compañeros.
Recuerdo aquellas conversaciones:
- Eso no existe (zaleo, arrecir, añusgar, bolarga...)
- ¿Qué nos apostamos?
- Lo que quieras.

Por suerte para ellos nunca me gustó abusar y me conformaba con la satisfacción de observar su cara al ver el resultado de una búsqueda en el diccionario.
Aunque también alguna que otra vez descubrí que esas palabras no estaban reconocidas y tuve que aguantar aquello de:
- Si es que en tu pueblo habláis raro.

La historia suele repetirse a medida que conozco gente nueva, lo bueno es que voy extendiendo esas palabras y expresiones, y a la vez aprendiendo otras (zanguango, atrochar, rodea...) .

¿No es maravillosa la riqueza de nuestro idioma?
¿Me enseñáis alguna nueva?

Etiquetas: ,

18 noviembre 2007

Otro Meme

"No me preocupa el no ser conocido.
De lo que trato es de hacerme digno de ser conocido."
Confucio


Justo cuando me iba a poner a escribir una nueva entrada he visto que PeterPanPais me había pasado este meme, así que he decidido posponer mis meditaciones para el siguiente.

1. Coge el libro más cercano, ve a la página 18 y transcribe la línea 4.
En la balda de la mesa siempre tengo una serie de libros, que son los que me pillaban más cerca. Incluyo algo más que la línea 4, aunque ésta la pongo en cursiva. Ahí van dos de ellos:

Antología poética de Mario Benedetti:
"Aquí hay pájaros, lluvia,alguna muerte,
hojas secas, bocinas y nombres desolados,
nubes que van creciendo en mi ventana
mientras la humedad trae lamentos y moscas"

Héroes de Ray Loriga:
"El caso es que en mañanas como ésas me sentía francamente jodido, y trataba de encontrar una molestia nueva y me reventaba encontrarme con la estúpida molestia de la infancia. Y no sólo por las mañanas, también por las tardes o por las noches corres el riesgo de tropezarte con cuerdas y palos y balones y ventanas y camas y todo tipo de familiares y amigos y desconocidos y programas de televisión".

2. Cuenta lo último que viste en la tele.
El telediario.

3. Aparte del ruido del ordenador, ¿qué más se escucha en este momento?
Negociando gasolina de La Fuga

4. ¿Cuándo te reíste por última vez?
Esta tarde con mi sobrino postizo.

5. ¿Qué hay en las paredes donde te encuentras ahora mismo?
Frente a mi hay un mueble de obra en el que hay libros, chorradillas como mis cofres o mis calaveritas, y uno de mis cuadros que me recuerda mi ciudad natal.
Es triste, pero aún no he colgado ningún cuadro en el resto de las paredes.

6. ¿Cómo vas vestido/a en este momento?
En pijama... ¿quien pensará estas preguntas?

7. Algo que los bloggers no sepan sobre ti
Uhm... No sé... preguntad si queréis (ya veremos si respondo), que no se me ocurre ahora mismo nada digno de mención o que quiera mencionar ;-)

8. ¿Cómo son tus manos?
Son grandes, de dedos flexibles, con unos cuantos lunares y una pequeña cicatriz en la derecha que me recuerda 1992...

9. ¿Qué ves desde tu ventana?
Casas, la chimenea de ladrillos de una antigua fábrica de cerveza, la luna...

10. ¿Qué imagen podría definirte?
Eso es algo muy difícil de decir, pero a la mente me viene una noche de luna llena.


Este creo que ya lo habéis hecho muchos, pero no recuerdo quienes, así que el que no lo haya hecho que lo haga, y no vale escaquearse.

Etiquetas: ,

10 noviembre 2007

Un minuto de ira

"Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo.
Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto,
en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto,
eso, ciertamente, no resulta tan sencillo."

Aristóteles, Ética a Nicómano.

En un segundo puedes tener una vida casi perfecta, y al siguiente haberlo perdido todo.

He intentado recordar cómo pudo ocurrir, pero todo es borroso. Me siento como cuando te despiertas de una pesadilla. Tienes el corazón acelerado, y la angustia taponando tu garganta y oprimiendo tu pecho. Solo que esta vez la pesadilla es real.
No soy una persona violenta, nunca lo fui, así que eso lo hace aún más difícil de entender.
No me consuelan esos "Tú no querías que esto ocurriera", "Él empezó"...

He oído hablar de él. Todos dicen que es imposible que él empezara la discusión, que era una persona pacífica, que nunca se metía en líos. Es curioso que esas mismas frases salieran de la boca de quienes me conocen.

Y sin embargo, ambos nos enzarzamos en una discusión de lo más tonta. Un empujón sin querer a la salida del metro, una respuesta violenta en lugar de un perdón... quizás el estrés al que nos vemos sometidos a diario, las prisas, la irritabilidad que todo ello nos produce... la pérdida de humanidad en la que sin darnos cuenta estamos cayendo...

Sí, él me dio el primer puñetazo, pero yo dí el último. Le golpee con todas mis ganas, descargando mi ira acumulada, una ira que nada tenía que ver con él, ni con un empujón involuntario en un lugar donde los empujones están a la orden del día.
Una mala caída... y en tan sólo un minuto nuestras vidas truncadas: él perdió la suya, y yo perdí aquella que hasta entonces había vivido.

Desearía que hubiera sido al revés, que hubiera sido yo el que cayera, pero no fue así, y tendré que vivir el resto de mi vida con ello... y no sé cómo voy a hacerlo.

NOTA: Antes de que haya malos entendidos: esto es un relato inventado, pero que, por desgracia, no se puede enclavar en la ciencia ficción.

Etiquetas: , ,

01 noviembre 2007

Lapsus

"Y así fue como aprendí que en historias de dos conviene a veces mentir...
que ciertos engaños son narcóticos contra el mal de amor..."
Mentiras piadosas. Joaquín Sabina.

Cogió el teléfono.
- ¿Sí?
- Upss
- Te has confundido.
- Sí...
- Ya... la llamabas a ella ¿no?
- Sí, pero he marcado tú número...
- Bueno, pues nada, cuelga y llámala.
- No, espera. ¿Qué tal?
- Bien ¿y vos?
- Bien, bueno...

Y entonces durante un largo rato le contó sus problemas...

- Será mejor que la llames.
- Sí... no sé porqué me ha salido tu número... - repitió.
- Mejor no se lo cuentes a ella. No creo que le hiciera mucha gracia...
- No, supongo que no...
- Bueno, ya hablaremos.
- Sí. Hasta luego.
- Chao.

Y ella no pudo dejar de pensar con cierta pena que, tras más de un año de relación con aquella chica, que llamara por error a su ex no era muy normal...

Etiquetas: , ,